Un gramo de cordura

Este blog es una buena excusa para investigar nuevas formas de entender la comunicación. El mundo se ha hecho glocal y, para no quedarse atrás, este blog quiere aportar un gramo de cordura y de sentido común hacia todo lo que se mueve en la Red.

Este bloc és una bona excusa per a esbrinar noves formes d'entendre la comunicació. El món s'ha fet glocal i, per no quedar-se enrrere, este bloc vol aportar un punt de cordura i trellat cap a tot el que es mou en la xarxa global.

martes, 5 de enero de 2010

Cibercatólicos
El pasado 15 de diciembre, la Agencia de Noticias del Arzobispado de Valencia (AVAN) me invitó a una comida con el titular de la archidiócesis valentina, D. Carlos Osoro, junto a un grupo de colegas periodistas de medios locales. Agradezco desde aquí el cordial encuentro que mantuvimos con su Ilustrísima en Palacio así como la amable invitación del titular de AVAN y estimado colega Luis Mª Agudo. Viene esto a cuento porque, desde que me he metido profesionalmente a tiempo completo en este asunto del Multimedia, le inquirí a D. Carlos acerca de la validez de la misas por Internet. A lo que el arzobispo y sus dos auxiliares, Esteban Escudero y Enrique Benavent, respondieron que no había todavía una normativa canónica al respecto. Las que se ven y se escuchan por televisión o por radio ya fueron autorizadas en su día por Pablo VI. Aunque la Iglesia recomienda "Preparar muy bien las misas televisadas y las transmitidas por radio para aquellos que están impedidos o no están obligados al precepto. Para ello se necesita conocimiento y preparación técnica."
No he encontrado en la Santa Sede http://www.vatican.va/ ninguna entrada que de validez canónica a una celebración litúrgica retransmitida por Internet. Pero sí que he encontrado en la Red iniciativas de diócesis católicas, como la Parroquia San Francisco Solano, dependiente del Arzobispado de Corrientes en Argentina, que la retransmite, en vivo por Internet, todos los domingos a las 10 y 18:30 (hora de Argentina). Aunque me temo que tales Misas se consideran, a todos los efectos, como radiofónicas sólo que se insertan también por Internet (de ahí lo de en vivo). Dadas las circunstancias, urge una reflexión de la jerarquía y sus doctores para que el cibercatólico sepa a qué atenerse en este asunto.

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